Huele a abril

Huele a abril. Los naranjos empezaron a repartir su aroma a azahar y yo vuelvo a mi niñez. Me refugio en esos recuerdos los días que las horas pesan y mi energía baja. Miro a esa niña de coleta de lado, zapatillas de lona y vaqueros azules e inspiro fuerte. Los que fueron mi todoSigue leyendo «Huele a abril»

Ceder y conceder

Primeros días de marzo y este mes ya me ofreció la primera de las lecciones y quizás una de las más importantes de los últimos meses. Hacía semanas que no tenía el corazón encogido ni las lágrimas asomaban pero la maternidad es un camino de los más difíciles y solitarios que conozco. Es justo ellaSigue leyendo «Ceder y conceder»